Copia esta lista de emociones en tu móvil, en Whatsapp o Telegram, por ejemplo, y pon al lado el emoticono que representa para ti esa emoción.
Envía la lista en blanco a 3 personas con las que más suelas hablar por Whatsapp o Telegram y pide que hagan lo mismo.
Compara las listas entre sí.
¿Coincides en los emoticonos utilizados en la lista con todas las personas a las que se lo has enviado?
Ahora te invito a reflexionar en tu libreta:
Si hay algunos emoticonos en los que no habéis coincidido, ¿Qué consecuencias crees que podría tener en la comunicación con esa persona?
Este pequeño experimento sirve para reflexionar sobre la importancia de la comunicación no verbal (gestos, postura del cuerpo, tono de voz…) que ayudan a que la comunicación sea más fluida y nos dan mucha información.
De ahí que a veces en Whatsapp haya malos entendidos, pues los emojis o emoticonos no pueden sustituir toda esa información que se da en una conversación cara a cara.
¿Cómo crees que se podrían evitar estos malos entendidos?
Te invito a mirar hacia dentro y a hacerlo por escrito, ya que ayuda a que la mente integre mejor las cosas que vas aprendiendo y experimentando.
Puedes aprovechar para combinar estas preguntas que te propongo aquí con las preguntas de la cita del sábado del Mindful-Club (mi comunidad gratuita por email) y conocerte un poquito más durante el recorrido de este reto.
– ¿Qué he aprendido en los retos de esta semana?
– ¿Para qué me ha servido? ¿Me he dado cuenta de algo?
– ¿En qué me ha ayudado?
– ¿Cómo me he sentido esta semana en general en las áreas de mi vida?
– ¿Cómo me he sentido esta semana con mi uso del móvil?
Mira tu app de registro del comportamiento de esta semana y escribe una breve descripción y reflexión.
Del 1 al 10:
¿Qué efecto ha tenido cada uno de los retos de esta semana en?:
¿Qué has aprendido durante el día de hoy? ¿Para qué te ha servido el reto?
Deja tus reflexiones y aprendizajes en los comentarios para compartir experiencias con los compañeros y motivarnos unos a otros en este reto.
