¿Cómo ser una buena madre?¿Puede el mindfulness ayudarme?
Mindfulness y maternidad se han hecho muy buenos amigos. Van juntos al parque.
Los niños no vienen con manual de instrucciones bajo el brazo y nos traen una buena cantidad de emociones encontradas y poco domadas. Por eso aprender mindfulness para gestionar tus emociones y ser la madre/padre que quieres ser, es tan importante.
Todas las mujeres se preguntas ¿cómo ser una buena madre? y la respuesta no es fácil, pero tampoco complicada. Al final de este artículo te doy mi gran respuesta a cómo ser una buena madre con todas las letras. Prometido. Ya verás que simple 😉 (como todo lo bueno en la vida).
Los americanos, que están hasta arriba de estrés y llevan con la práctica de meditación mindfulness desde que John Kabat Zinn abrió la «Clínica de Reducción del Estrés» en el 79, han investigado cómo casar maternidad-niños-mindfulness para una correcta educación de los niños, una sana relación para los padres y sana relación tú-y-tu-maternidad, tú-y-tu-paternidad.
La maternidad que incluye los principios de Mindfulness se llama mindfulmotherhood, siendo Cassandra Vieten quien ha lanzado el programa más conocido para mujeres.
Por otro lado fue el mismo Kabat Zinn quien habló por primera vez de las habilidades y el poder de la atención plena aplicado al contexto familiar, a la educación y al cuidado de la familia. Kabat-Zinn lo llamó Mindful parenting y su entrenamiento consiste en un programa de 8 semanas con sesiones semanales de entrenamiento en todas estas habilidades mindfulness.
¿Cómo ser una buena madre y por qué necesito aprender mindfulness, mindful parenting, mindfulmotherhood o como **** lo quieran llamar?
La maternidad/paternidad temprana es un tramo de la vida donde experimentaremos infinitos cambios a todos los niveles. A ratos lo vivimos con ilusión, pero luego llega el cansancio, y luego el amor hacia la familia que se está creando, y luego estrés, y luego dudas…
- Hay cambios laborales,
- Cambios en las relaciones,
- Cambios físicos,
- Cambios en la relación de pareja…
- ¡Cambios incluso en tu rol en la vida!
De repente tienes a tu cargo un ser, y tienes un nuevo rol que ocupa mucho tiempo.
Muchos padres se lanzan en busca de una escuela de padres donde poder aprender a gestionar esto, (o a terapia).
¿Hay alguna forma de tener las habilidades necesarias para disfrutar de esta nueva etapa y mantener lo importante de mi vida en equilibrio? Claro que sí, sigue leyendo 🙂
¿Puede el mindfulness ayudarme a ser una buena madre y a la vez una mujer plena?
El Mindfulness para niños y la maternidad mindfulness (del inglés minful motherhood) son un conjunto de habilidades a desarrollar y a su vez una forma de vivir ese rol que has asumido con tu maternidad (paternidad también). Estas habilidades y enfoque traerá muchos beneficios a tí misma, a tu niño y a tu relación.
La maternidad mindfulness trabaja a un nivel muy profundo y transforma el modo de vivir lo que nuestra vida nos va poniendo por delante. ¿Cómo?
- Siendo más capaces de abrirnos a la experiencia, de fluir.
- Tomar perspectiva.
- Aceptar los «tragos difíciles» inevitables en este proceso de cambios.
- Observar lo que ocurre con comprensión y actitud de ayudar.
- Tomar decisiones coherentes con lo que es realmente importante para ti y no acabar como las mujeres de la imagen de arriba en el coche.
- Tratarte bien. Todo este proceso tiene momentos difíciles y es importante que te respetes, honres y ayudes. Que te trates bien en todas las partes del proceso de adaptación y educación (que no termina).
¿Cómo ser una buena madre con los principios de la maternidad mindfulness?
Primero: Tú sabes qué tipo de madre quieres ser.
Seguramente si cierras los ojos e imaginas situaciones futuras, fantaseas con un tipo determinado de película, con tener cierto estilo de educación, comunicación, compartir X experiencias, ser cierto tipo de familia incluyendo a tu pareja (si la tienes).
Perfecto, esos son tus valores en tu maternidad.
Por ejemplo:
Quiero ser una madre con autoridad. Entiéndeme, no Hitler, solo una madre que puede decirle a su hijo que no es el momento de ver Pocoyó, y no por eso se monte un pollo.
Esto para mí es muy importante porque esta autoridad permite fomentar una familia cercana en la que no se monten dramas con mi niño Eneko ni debates a gritos, ni mi marido ni yo nos enzarzemos en los humildes chantajes emocionales del peque.
Cuando imagino mi familia, no quiero ser una de esas madres al borde de un ataque de nervios, que no para de gritar, que se deja a sí misma y a su pareja para el último minuto del día si sobra algo.
Quiero llegar a viejita y recordar que en la infancia de Eneko tuve paciencia y disfruté de los cambios que iba haciendo, que jugué con él, le leí cuentos, le aplaudía cuando daba lo mejor de él independientemente del resultado y le enseñaba a sentir su frustración cuando la vida no encajaba en sus expectativas, y a buscar un plan alternativo y así enseñarle a aprender.
Quiero recordar que he sido una mami que siempre cuidó de sí misma, que a pesar de no poder dedicar todo el tiempo de antes a lo que le gustaba tanto, mantuvo la esencia y respetó en cuanto pudo un tiempo de la semana para hacer lo que siempre disfrutó.
Quiero verme siempre como una madre que cuida a esa persona de la que se enamoró a tal punto de emprender un proyecto de familia, que hace cosas porque la sonrisa de su pareja se mantenga y siempre ese vínculo que nos une esté plagado de buenos momentos.
¿Cuáles son tus valores? Escríbelos.
Segundo: identifica pautas educativas y hábitos que cultiven lo que deseas.
¿Cuáles son las pautas educativas y los hábitos que habría que desarrollar para materializar esa visualización que hiciste antes?
¿Eso que da sentido a tu maternidad, eso que quieres ver de ti misma como madre y te haría estar feliz?
Siguiendo el ejemplo:
Aprender cómo funcionan las rabietas de Eneko
(leyendo un libro o blog de algún psicólogo infantil, observando cómo funciona mi hijo y viendo qué efecto han ido teniendo las diferentes reacciones que mi marido y yo hemos ido teniendo, para poder aprender de la experiencia y perfeccionar.)
Planear al menos una vez al trimestre alguna escapadita y hacer cosas diferentes.
Una salida a Córdoba en primavera, fin de semana por la sierra de Cazorla, un puente a ver la familia en Asturias, escapada a Madrid… y hacer cosas estimulantes para que Eneko explore sus habilidades, se exponga a situaciones diferentes fuera de su control, y mi marido y yo salgamos de la rutina: bajar el Sella en canoa, ir a un parque acuático, paseos por la naturaleza, probar comidas diferentes como tailandesa, vietnamita, africana, japonesa, mexicana…
Otro hábito: con cierta frecuencia, poner la mesa muy bonita en la terraza, velita y hacer una cena especial con una botellita del vino que le gusta a mi cari.
Poner música de fondo y regalarnos ese momento especial a pesar de ser normal. Pero darle el toque especial.
Me encanta cocinar pero con Eneko no tengo tanto tiempo de disfrutar esos momentos de cocina especial que antes eran un hobby. Implementando ese hábito, además de cuidar mi relación y darme un momento de relax y placer con esa cena Gourmet, encuentro la excusa para cocinar y hacer algo de eso rico y diferente que me encanta.
Cuidar mi cuerpo y mi mente.
Seguir cuidando mi mente y mi cuerpo, así que: no dejar de echarme cremas, darme mis masajitos en los pies (sí, soy de pies delicados), arreglar el pelo, hacer algo de actividad física y no esconderme en ropa enorme que no me guste. Cuidar mi femeneidad.
¿Para mi mente? of course mantener mi práctica de meditación siempre que pueda. Para ello, reservo parte de algunas mañanas o después de la siesta antes de comenzar la tarde. Además hago todo lo que puedo de práctica informal de mindfulness en el día a día, y eso es el gran cambio.
Un poco de mindfulness digital: Detectar los ladrones de tiempo o robavidas y tratar de reducirlos.
¿Qué es un robavidas Alba? eso que ocupa tu tiempo y no te aporta nada. Simplemente consume tu vida y agota tu energía.
Por ejemplo, algunos hábitos para mejorar en este punto es:
- Quitar la app de Facebook del móvil,
- Dejar de subir fotos todo el día o perder el tiempo en ver publicaciones de la gente que no me aportan nada.
- Limitar el uso de Instagram a un momentito al día.
- No atender temas de trabajo a partir de cierta hora para poder dedicar ese tiempo a mi familia.
- Irme a la cama dejando el tlf en el salón y
- Usar el despertador de toda la vida…
Es decir, un uso más consciente de mi tiempo, lo cual me permitirá dedicarme más a lo importante, quitarme ruido mental y reducir la sensación de no llegar. Este conjunto de herramientas se llama mindfulness digital.
¿Cuáles son los pequeños pasos que te orientarán hacia esos valores? ¡Escríbelos!
Tal y como yo he hecho, toma cada valor del primer ejercicio e identifica una serie de hábitos y acciones que orienten tus pasos a la dirección que deseas tomar en esta nueva etapa de tu vida.
Los valores personales no son objetivos a conseguir, son rumbos permanentes, como lo son el Norte, Sur, Este u Oeste. Puede ser que para ti en tu vida, ir al Sur tenga significado. Nunca llegarás, pero sí llegarás a la ciudad que tienes al sur, y luego a la siguiente ciudad, etc.
El primer ejercicio nos da el horizonte al que enfocarnos.
En este segundo ejercicio tenemos que ver «en el gps» por dónde hay que pasar y cómo organizar el viaje.
Así que por cada punto, piensa los pasos que deberías de dar, decisiones a tomar, cosas que aprender (siendo así, escribe cómo aprenderías eso).
Este punto se basa en ser muy práctico, operativo. Es paso previo a la acción.
Tranquila, no tienes que hacer todo lo que apuntes ahora de por vida. No hay látigos.
¿Por cuál empezar?
Observa los puntos del recorrido por los que tienes que pasar y la forma de llegar a ellos.
Ten en cuenta cómo te encuentras, tu situación actual en todos los sentidos y comprométete con alguno que se adapte bien (aunque cueste).
Empieza por ese y ve poco a poco hasta que se vaya integrando.
Después, puedes continuar.
Tienes un mapa al que volver una y otra vez para consultar cuál es la forma óptima de hacer TU viaje en tu maternidad y tu vida como mujer.
Este mapa va a ser el que te permita vivir plenamente, en coherencia.
De verdad, no lo olvides.
No dejes que los ritmos diarios te traten como una marioneta y cada día te pierdas más en un sinsentido de automatismos e incongruencias vitales hasta llegar a que tu hijo de marche de casa y tu mente solo diga:
¿Y ahora qué tengo en la vida?¿quién soy?
[bctt tweet=»¡A las mamis! mirad qué ejercicios de #MindfulnessParaMadres se plantean aquí. Foco, claridad y compromiso con tus valores como #MujerYMami ¿Os animáis? #YoCojoElTimón #MamiFeliz #NoMasCrisis » username=»@themindrepublic»]
#themindNote: En Tribu somos más fuertes.
Comparte tus retos con las otras mamis en los comentarios para poder ayudarnos todas y aprender de la experiencia de las otras mamis.
Además, cuando escribimos algo fortalecemos nuestro compromiso 😉
Así que:
-Ve a los comentarios.
–Escribe las acciones específicas con las que te has comprometido en el segundo ejercicio y el valor al que está orientado en tu maternidad y vida (primer ejercicio).
Nos vemos en el siguiente post, que será una continuación de este. Como se que tras lo que hemos visto la reacción es «pero es que…» y ahí aparecen todos los obstáculos por los que aún no estamos haciendo lo que necesitamos hacer para vivir plenas y en coherencia.
Cómo gestionar los obstáculos en mi maternidad.
Esto es una conversación con vosotras.
Cualquier petición que tengáis sobre material, post, ejercicios en audio… Lo que sintáis que necesitéis, dejadlo en los comentarios y haremos todo lo posible para dároslo.
Que tengáis un feliz día y no os olvidéis de lo que habéis visto de vuestros valores en estos ejercicios.
Consigue tu entrenamiento.
Para las mamis es imprescindible aprender a estar en el momento presente y no irte con cada pensamiento que pueda surgir de desesperación por una llantina, no engancharte en las rabietas del peke, no olvidarte de ti misma y seguir el bucle de pensamientos de estrés y aprender a desconectar.
Te dejo 3 ejercicios gratis para dejar de rumiar los pensamientos.
También, si quieres ir más rápido y quieres un entrenamiento en profundidad pero poco a poco de la mano conmigo durante 10 semanas, échale un vistazo al curso de mindfulness El Arte de Meditar de tal forma que funcione.